Más habitualmente de lo deseado me encuentro con la desagradable situación de tener que recuperar un sistema Linux con el arranque dañado por culpa de alguna aplicación orientada al entorno MS Windows.
La solución es casi más sencilla que haberlo estropeado, necesitamos un CD o USB Live que permita arrancar Linux. Una vez arrancado:
- Montamos la partición donde teníamos montado /boot (normalmente la del sistema linux)
- En una consola escribimos ‘sudo su’ (para ejecutar todos los comandos como root)
- Podemos hacer un ‘mount’ para ver dónde se ha montado la unidad con la partición con la carpeta /boot, en mi caso /dev/sda6 en /media/XXXX
- Hacemos ‘grub-install –root-directory=/media/XXXX /dev/sda’
Esto escribirá el MBR de forma que podamos arrancar el grub, y configurará el grub para poder arrancar nuestro sistema Linux como antes.